Puedes sustituir el brócoli por otras verduras, según la temporada: champiñones salteados, calabaza en dados, zanahorias, etc. ¡Esta es una de las recetas más versátiles!
Como recomendación, para cocer el brócoli congelado, puedes hacerlo al vapor (calienta agua sin sal en un recipiente pequeño y coloca una cesta de cocción al vapor sobre ella) o hervirlo en agua con sal. Un consejo útil que te servirá para otras muchas recetas.
Si utilizas cabezas de brócoli frescas: puedes cocerlas en agua hirviendo con sal y luego sumergirlas en agua helada para que el brócoli se mantenga verde. Ralla también los tallos del brócoli: los tallos de brócoli rallados son un delicioso truco de cocina contra el desperdicio, que puede utilizarse para otras recetas, como el arroz salteado con jengibre y anacardos.
Otro consejo en el caso de que no tenga fideos de soba, es cortar láminas de lasaña o utilizar otras formas de masa. Esta receta de fideos fritos al estilo asiático también puede hacerse con pasta sin gluten. En definitiva, una preparación sencilla pero llena de posibilidades.
Puedes enriquecer esta receta de fideos soba con tiras de cerdo salteado, unos trozos de tofu firme o pollo en dados. También se pueden utilizar restos de pollo asado, chuletas de ternera o pollo empanado, servidos como guarnición o mezclados en el plato.
Para un sabor más picante, añade unas pizcas de guindilla roja y un chorrito de zumo de limón. La salsa de soja es salada por naturaleza, así que no es necesario añadirla en esta receta de fideos de soba.