Recetas de crepes dulces y salados

Las calles de París están repletas de pequeños puestos de comida dedicados exclusivamente a cocinar uno de los platos más internacionales de la cocina francesa: los crepes. Pero no hace falta viajar a la capital del amor para poder disfrutar de esta deliciosa y versátil receta, que se puede combinar tanto con ingredientes dulces como salados.

Si te preguntas cómo hacer crepes, desde Bonduelle hemos seleccionado las mejores recetas de crepes, te detallamos el proceso de elaboración y los ingredientes para hacer crepes tanto dulces como salados, así como alternativas sin gluten y sin huevo para aquellos que quieran disfrutarlos sin problemas.

En la receta básica de crepes no hay mucha diferencia a la hora de prepararlos dulces o salados, esto viene dado por las distintas combinaciones que podemos hacer con esta especie de tortita tan versátil. Con esta receta fácil y rápida, tendremos crepes para 2 o para 1 si somos de buen comer.

Ingredientes (unos 4 crepes de gran tamaño):

• 250 ml de leche entera.
• 2 huevos grandes.
• 125 gr. de harina (si es de trigo mejor).
• Sal.
• 25 gr. de mantequilla (a ser posible sin sal).

*Si queremos preparar crepes dulces, solo tendremos que añadirle un poco de azúcar a la receta, al gusto, e incluso alguna gota de esencia de vainilla o canela. Si por el contrario queremos que sean crepes salados, solo habría que añadirle un poco más de sal y alguna especia como, por ejemplo, perejil.

Elaboración (20 minutos)

Lo primero que debemos hacer es tamizar la harina, para ello cogemos un colador y encima de un cuenco grande hacemos pasar la harina espolvoreando con cuidado. Después, hacemos un hueco en el centro de la harina y echamos los dos huevos. Mezclamos con un batidor de varillas e incluimos la mantequilla derretida y la pizca de sal.

Pasamos la masa a una jarra apta para batidora y vamos batiendo mientras incluimos poco a poco la leche intentando que no se formen grumos. Este es el momento de decidir si queremos que nuestros crepes sean dulces o salados. Para la primera opción solo hay que incluir una cucharada de azúcar; para la segunda, un poco más de sal y alguna especia como el perejil. Batimos, tapamos la jarra y la introducimos en la nevera, dejamos que repose durante, al menos, media hora.

Pasado este tiempo, o incluso más, por ejemplo, si queremos tener la masa lista para el desayuno y no madrugar podemos dejarla preparada la noche anterior en la nevera sin problema, la dejamos reposar unos minutos fuera del frío, mientras en una sartén caliente echamos una pizca de mantequilla y esperamos a que se derrita. Con un cazo, echamos un poco de la masa en el centro de la sartén antiadherente y la distribuimos con cuidado con el reverso, intentamos que tenga un grosor lo más fino posible. Cuando veamos que la masa se puede despegar sin dificultad de la sartén, dale la vuelta con una espátula y la dejamos hacerse un par de minutos más hasta que el otro lado tenga un ligero color dorado. Lo sacamos de la sartén y ya tenemos nuestro crepe.

 

 

Hay muchas opciones para disfrutar de unos buenos crepes de desayuno, postre o merienda con un toque dulce, aunque, quizá la opción más conocida es aquella que incluye un buen chorro de chocolate derretido o sirope con una bola de helado de vainilla.

Si queremos hacerlo un poco más sano, en vez del helado podemos incluir distintos tipos de frutas como plátanos o rodajas de naranja.

 

También existen múltiples combinaciones, pues el sabor ligero de la masa de los crepes hace que se puedan combinar con todo, pero la receta más popular, sin duda es la convierte el clásico sándwich de jamón y queso en el relleno perfecto para esta tortita de origen francés.

Si queremos ser más atrevidos podríamos utilizar como relleno la perfecta combinación de los champiñones con la bechamel o el pollo y las espinacas o del salmón con un queso al estilo Philadelphia. ¡La imaginación al poder!

 

Para esta receta de crepes, tanto dulces como salados, solo tenemos que sustituir uno de los ingredientes, el huevo, por un poco de aceite de oliva.

Ingredientes (unos 4 crepes de gran tamaño):

• 250 ml de leche entera.
• Media cucharada de aceite de oliva.
• 125 gr. de harina (si es de trigo mejor).
• Sal.
• 25 gr. de mantequilla (a ser posible sin sal).

Elaboración (20 minutos)

Tamizamos la harina y la mezclamos con la sal o el azúcar (depende de si queremos que sea dulce o salado), con ayuda de una cuchara o las manos. Introduce poco a poco la leche y bátelo todo junto incluida la cuchara de aceite de oliva y la mantequilla derretida. Cuando esté todo bien mezclado y sin grumos, lo dejamos reposar unos minutos mientras preparamos la sartén en la que los cocinaremos.

Derretimos otro poco de mantequilla en la sartén y con ayuda de un cazo echamos un poco de la masa en el centro y la repartimos a los laterales con el reverso. Cuando el crepe se despegue sin dificultad, le damos la vuelta y cocinamos un par de minutos. Lo retiramos del fuego y decidimos si queremos mezclarlo con elementos dulces o salados.

 

Que ser celíaco no nos impida disfrutar de una de las recetas más sencillas y deliciosas de la gastronomía francesa, solo tenemos que sustituir la harina de trigo por otra de arroz o maíz.

Ingredientes (unos 4 crepes de gran tamaño):

• 300 ml de leche de soja o normal.
• 2 huevos grandes.
• 200 gr. de harina de maíz o de arroz.
• Sal.
• 1 cucharada de aceite de oliva.

Elaboración (20 minutos)

Al igual que en anteriores ocasiones, tamizamos la harina con ayuda de un colador y la mezclamos con los huevos, la sal y el aceite de oliva. Después, lo pasamos por la batidora mientras introducimos poco a poco la leche. Dejamos reposar en la nevera una hora como mínimo, espolvoreamos aceite en una sartén a fuego y cuando esté caliente cocinamos la masa de crepes que podremos combinar tanto con ingredientes dulces como salados.

 

La avena es una de los cereales más apreciados por su alto contenido en proteínas y minerales, que lo convierten en una alternativa muy saludable para todos aquellos que quieren disfrutar de un desayuno sano sin poner en riesgo el sabor.

Ingredientes (unos 4 crepes de gran tamaño):

• 150 ml de leche de soja o normal.
• 2 huevos grandes.
• 6 cucharadas soperas de harina de avena.
• Sal.
• Aceite de oliva.

Elaboración (20 minutos)

En esta ocasión empezamos del revés, es decir, mezclando primero los ingredientes húmedos, la leche y los huevos, en un bol. Después iremos introduciendo poco a poco la harina de avena mientras mezclamos bien. Echamos la sal o el azúcar si queremos hacerlos salados o dulces.

Cuando no queden grumos, en una sartén caliente echamos unas gotitas de aceite de oliva y con un cazo echamos la masa necesaria que esparciremos por toda la superficie hacia los bordes. Cuando el crepe ya no esté pegado al fondo de la sartén, le damos la vuelta y lo dejamos un par de minutos. Recuerda que también se pueden servir rellenos y... ¡a comer!